La Dirección General de Tráfico (DGT) activará durante la Semana Santa nuevas patrullas integrales con las que los motoristas de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil llevarán ‘mini-radares’ para controlar la velocidad de los vehículos que circulen por las carreteras españolas, así como alcoholímetros y detectores de drogas.
El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, presentó ese nuevo modelo de vigilancia en carretera y aseguró que las «patrullas integrales» son «pioneras en Europa» y los agentes encargados de la vigilancia y el control del tráfico van a poder actuar específicamente sobre algunos de los factores que más inciden en la siniestralidad en las carreteras convencionales, donde se producen ocho de cada 10 accidentes.
Subrayó que están formadas por guardias civiles de la unidad de motoristas que cuentan con motocicletas o vehículos a cuatro ruedas dotados de medios portátiles que les permitirán ‘in situ’ controlar la velocidad y hacer pruebas de detección de alcohol y drogas de forma autónoma sin el apoyo de los equipos de atestados ni de los de control de velocidad.