España se mantiene, junto con Reino Unido y Francia, como líder de la UE en consumo de cocaína y cannabis entre los jóvenes, aunque el uso de estas sustancias tiene a disminuir desde el máximo alcanzado en 2008, según el informe anual del Observatorio Europeo de las Drogas.
El estudio alerta no obstante de que los «signos positivos» que se detectan en las drogas más tradicionales «se ven contrarrestados, por las nuevas amenazas que plantean las drogas sintéticas, incluidos estimulantes, nuevas sustancias psicoactivas y medicamentos, que tienen una presencia cada vez mayor en un mercado de drogas europeo en constante evolución».
Se estima que alrededor de 2,2 millones de adultos jóvenes de entre 15 y 34 años (el 1,7% de este grupo de edad) consumieron cocaína el año pasado, que sigue siendo la principal droga estimulante. España encabeza la clasificación ya que el 3,6% de los jóvenes consumieron cocaína el último año, más del doble que la media comunitaria. Le siguen Reino Unido (3,3%), Irlanda (2,8%) y Dinamarca (2,4%). Los países con menos consumo son Grecia y Rumanía (0,2%).
«En Dinamarca, España y el Reino Unido, las tasas de prevalencia fueron relativamente elevadas, aunque van disminuyendo después del máximo alcanzado en 2008», apunta el estudio.
Los envíos de cocaína a Europa proceden «casi exclusivamente» de Bolivia, Colombia y Perú. «El tráfico de cocaína a Europa parece producirse principalmente a través de los países de Europa occidental y del sur, ya que España, Bélgica, Países Bajos, Francia e Italia totalizaron el 85% de las 71 toneladas incautadas en 2012», apunta el Observatorio.
Por lo que se refiere al cannabis, se trata de la droga ilegal más consumida en todos los grupos de edad. Se estima que 14,6 millones de jóvenes la consumieron en el último año (el 11,2%). España ocupa el cuarto puesto de la clasificación (con una tasa de prevalencia del 17%), sólo superada por República Checa (18,5%), Dinamarca (17,6%) y Francia (17,5%). El menor consumo de cannabis se detecta en Rumanía (0,6%), Malta (1,9%) y Grecia (3,2%).
No obstante, el informe apunta que «España notifica también la prevalencia (de cannabis) más baja de la última década». «En Alemania, Francia y el Reino Unido, la tendencia en la última década ha sido estable o en descenso», mientras que «en Dinamarca, Finlandia y Suecia pueden observarse tendencias al alza del consumo de cannabis».
Los jóvenes españoles también superan la media comunitaria en consumo de éxtasis (con una tasa de prevalencia del 1,4% en la franja de edad entre 15 y 34 años, frente al 1% de promedio en la UE) y anfetaminas (1,1% frente al 0,9%).
En cuanto a la heroína, los últimos datos sobre admisiones a tratamiento e incautaciones practicadas en Europa apuntan a una tendencia a la baja en su consumo y disponibilidad. Se estima que hay en Europa 1,3 millones de consumidores problemáticos de opiodes, en su mayoría de heroína.