El Pabellón del Parque era la fiesta del baloncesto provincial, con el derbi navideño entre el Bueno Arenas Albacete Basket y el Almansa, pero la grave lesión de Chandler Jacobs, jugador local que tuvo que retirarse en camilla entre grandes muestras de dolor, dejó a todos helados. Ya lo de menos fue el resultado, por 80-60 a favor del conjunto albaceteño.
Jacobs cayó al hacer la bandeja y su tobillo sangraba por una fractura abierta, ante lo que ha tenido que ser trasladado al Hospital en Ambulancia, mientras que las caras de susto y temor predominaban entre directivos y compañeros, tanto del Bueno Arenas Albacete Basket, como del Almansa.
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Se reanudaba el encuentro tras unos minutos de tensión por la grave lesión de Chandler Jacobs pero lo de menos ya era el resultado del partido, el dolor del jugador local había calado en todos que seguían con preocupación lo sucedido, a la espera de conocer el alcance de la lesión.
Jacinto Navarro, presidente del Bueno Arenas Albacete Basket, era uno de los más afectados sobre la pista, mientras que el jugador recibía la primera atención sanitaria. Jacobs abandonaba el pabellón en camilla, entre los aplausos de todos los presentes.
La situación dejaba tal tristeza que incluso el club ha decidido suspender las ‘campanadas’ que iban a celebrar tras el derbi, en colaboración con Globalcaja. Habían animado a los aficionados a llevar sus uvas para despedir desde el Pabellón del Parque, un día antes, el año 2023 y recibir el Año Nuevo con los mejores deseos, pero con lo sucedido con Jacobs no quedaban ganas de fiesta ni había motivos para celebrar esta noche.
Más tarde, el club señalaba que el jugador pasará la noche en el Hospital, a la espera de la realización de pruebas. Ha agradecido las muestras de interés por su estado de salud, tras la lesión.
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En lo puramente deportivo del derbi, el primer cuarto deparó un gran ritmo e intensidad, puesto que ambos equipos demostraban desde el inicio que querían el triunfo. Sin embargo, fueron los almanseños quienes supieron estar más acertados de cara al aro y terminaron adjudicándose ese primer parcial por un resultado de 16-20.
Tocaba remontar para un Albacete Basket que supo hacer los ajustes necesarios en su juego, sintiéndose cada vez más cómodo sobre la pista y, como se suele decir, dándole “la vuelta a la tortilla” justo antes del descanso. Los locales se marchaban a vestuarios con ventaja: 45-41, pero quedaba todo por decidir en un duelo que se antojaba vibrante.
Pero el segundo tramo fue muy distinto. El conjunto dirigido por David Varela supo prolongar las buenas sensaciones mostradas en el segundo cuarto, reencontrándose así con su mejor versión y siendo notablemente superior a un CB Almansa que tuvo que afrontar los últimos 10 minutos con una desventaja de 21 puntos (69-48).
Finalmente, en ese tramo final el Bueno Arenas Albacete Basket no bajó la guardia y terminó culminando la victoria por 80-60.
Decía, con el final del encuentro, el Bueno Arenas Albacete Basket en sus redes sociales que hoy no había nada que celebrar y así era, la lesión de Jacobs empañó la fiesta de fin de año en el Pabellón del Parque.
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