El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha indicado hoy, sobre el pacto del PSOE con Junts, que: «Mis opiniones son como presidente, soy totalmente autónomo y pongo por delante a la región a los intereses de mi formación política. No vamos a tolerar bajo ningún concepto que alguien utilice la singularidad, la pluralidad de España, el cuento de la lechera para tener privilegios. Tiene que vincularse, sí. Normalmente soy de los que hablan claro, no solo va a hablar Puigdemont, también puede hablar Page. Y yo lo hago desde España».
«Les digo con mucha tranquilidad que será imposible, con pacto y sin pacto, lo quiera o no un gobierno, será imposible que salga un proyecto que privilegie a una parte de España y será absolutamente imposible que haya una votación que ponga en cuestión la Constitución Española, eso no se puede votar y menos aún en un parte del país», ha considerado.
Más allá del ruido que nos lleva a estar muy preocupados, de las opiniones y cambios permanentes de opinión, tengan un cuenta una cosa que no es aviso ni amenaza, si hay que ejercer recurso, lo haré, si hay que plantear batalla lo haré», valoraba.
Ha detallado que «me opuse a la amnistía porque significa borrar un delito sin que se hayan rendido cuentas, ahora veo que hay algo peor, el intento de reescribir lo que pasó o lo que ha pasado. Discrepo por completo del relato que se planteó ayer, es un relato falso, Puigdemont es culpable, no es víctima de nada. Los jueces han aplicado las leyes y no pueden ser objeto de persecución. No se puede curar una enfermedad sin un diagnóstico bueno. Cuando el relato es falso que nadie piense que va a solucionar el problema».
Lo que vi ayer es mucha necesidad de gobernar y de librarse de la cárcel, y ninguna virtud», consideraba.
Ha advertido que: «Seguiré diciendo lo que pienso, cumpliendo con las responsabilidades institucionales, pero teniendo claro que la gente que se siente presa de polarización. Y esto nunca le ha ido bien a España cuando ha pasado, me van a encontrar siempre, en posiciones ponderadas, intentando abrir puentes de diálogo y consenso. Se está movilizando a una parte del país para que no llegue la derecha al gobierno, pero se está dando el mando a la derecha independentista. Están intentando cerrar el paso a la derecha, pero dando el mando a distancia a la derecha independentista».
«Dejar en manos de alguien que odia España y la Constitución y que deja claro que quiere la amnistía, pero que si no se cumple, volverá a las andadas, que alguien así tenga el mando de la estabilidad es para tener preocupación, cuando no tristeza», consideraba.
Sobran resortes en España legales y democráticos para que las cosas se encaucen, soy optimista. El único camino que no podemos tolerar es el de la violencia, la violencia solo trae violencia, todos los argumentos con respeto pueden ser muy útiles, ni un solo argumento desde la violencia o creación de miedo puede traer consecuencia positiva. Nos van a encontrar en posición dura y firme, pero muy respetuosa.
Ha considerado que «lo peor que nos puede pasar es que el ansia de gobernar se convierta en dar capacidad de decisión a quien su decisión es acabar con la unidad del país y de la Constitución. En este país hay resortes siempre de sobra, que la gente lo sepa» y ha reiterado que «detrás del independentismo está el egoísmo en estado puro y yo estoy en política para impedir cualquier tipo de privilegios».